Las agresiones a médicos son casi 14 al mes y en Primaria cuatriplican las de hospitales

La violencia verbal contra el personal facultativo del Sergas creció un 6% el último año y Urgencias es el punto más caliente

Los centros de salud vivieron más de cien de actos de violencia, física e insultos

Un médico en el interior de un centro de salud de Santiago de Compostela.

Un médico en el interior de un centro de salud de Santiago de Compostela. / Xoán Álvarez

Elena Ocampo

Elena Ocampo

Médico, ¿una profesión de riesgo? Si lo primero que piensa el lector es que las guardias o los años como MIR pueden hacer mella en la ansiedad del profesional, o elevar su estrés y presión sanguínea, omiten un dato no menos alarmante: las agresiones a médicos, aunque se estancan, son casi 14 al mes en Galicia. Es decir, un facultativo del sistema sanitario público tiene una razón (extra) que le penaliza por su proyección ante el paciente: el peligro de las tan condenadas agresiones a personal sanitario que, año tras año, siguen engrosando un penoso listado.

Hasta 151 agresiones verbales y otras 13 físicas, a veces en combinación con amenazas o ataques verbales graves, fueron registradas por el Sergas en el transcurso de 2023. Aunque los golpes y otras agresiones físicas cayeron –muy sutilmente, en solo 3 con respecto al año anterior– los insultos y amenazas registrados aumentaron. Es decir, la violencia verbal contra el personal facultativo del Sergas creció un 6% en 2023

Muchas no llegan al Juzgado –advierten fuentes consultadas en la Xunta– pero otras, ni siquiera constan en ningún lado: no se denuncian. Atención Primaria concentró más de un centenar (103) de actos de violencia de diverso tipo, mientras que los hospitales gallegos vivieron 28 episodios de este tipo, la atención domiciliaria 2 y otros lugares del ámbito sanitrario otras 2. Y en la geografía de los puntos más calientes para las colisiones con pacientes, el epicentro se sitúa en las Urgencias. Da igual si se trata de las emergencias de atención primaria u hospitalaria, pero especialmente las primeras se cobran el mayor número porcentual de episodios violentos: fueron hasta 22 a lo largo del año pasado. Es más, los incidentes en Primaria casi cuatriplican a los registrados en hospitales, siguiendo los datos proporcionados por la Consellería de Sanidade y que constan en sus propios registros.

Pero, si queremos adentrarnos en algunos de los motivos, estos aparecen recogidos –ya no solo en el ámbito gallego, sino estatal– en datos del Observatorio Contra las Agresiones de la Organización Médica Colegial (OMC). Dentro de las causas asistenciales, la principal causa de la agresión es la discrepancia con la atención médica recibida que se sitúa en el 58% en el año 2023 y cinco puntos más que el año anterior. También son motivos de agresiones las discrepancias personales (11%) y los informes no acordes a las pretensiones (13%). En cuanto al tipo de ejercicio en el que se ha producido las agresiones en el año 2023, también mantienen datos similares a los de años anteriores con una preponderancia del ejercicio público (90%) frente al privado (10%).

De todas las agresiones, el 94% se producen en horario y entorno laboral. En la distribución por edades el informe resalta que el mayor aumento por rango de edad se ha producido entre los colegiados entre los 36 y 45 años (28%), cinco puntos más que en 2022. Los datos también muestran que el tipo de agresores son principalmente pacientes programados (47%), seguidos de pacientes no programados (30%) y acompañantes (22%). El perfil medio del agresor coincide con un varón entre los 40-60 años, aunque en el tramo etario de menores de 40 años predominan las mujeres.

Pero las agresiones no solo afectan a personal médico. El SATSE subraya que en Galicia más de 300 enfermeras y fisioterapeutas fueron víctimas de alguna agresión durante el desempeño de su trabajo, a juzgar por los que han sido atendidos y asesorados en 2023 por personal especializado a través de un servicio telefónico gratuito del que dispone el sindicato.